Hace más de seis siglos, en 1338, fue fundada la segunda ciudad más importante del Imperio Mexica. Tlatelolco, el lugar del montículo de tierra, fue erigido por algunas familias que se separaron de Tenochtitlan; el sitio había sido antes paraje de pescadores teotihuacanos.
Más ocupados en el comercio que en la guerra, los tlatelolcas llegaron a tener el mercado más importante de la zona, e intercambiaban sus mercaderías hasta las costas del Golfo de México y del Océano Pacífico. Según expresión de Hernán Cortes, “Tlatelolco era una plaza grande como dos veces la ciudad de Salamanca”
Último reducto de los mexicanos antes de la conquista española y sitio de aprehensión de Cuauhtémoc, en la época colonial Tlatelolco se convirtió en capital de la población indígena recién sojuzgada. Es por ello que los franciscanos edificaron en este lugar el Colegio Imperial de Santiago Tlatelolco, por cédula real de Carlos V.